La llamada piel natural Napalan, como la del chaquetón manchado de pintura que protagoniza este trabajo, pertenece a la familia de pieles lisas, similares a la piel vuelta, pero con un acabado resinoso que le aporta apariencia de cuero.
Es un material muy sensible a los roces, que con el uso habitual va perdiendo progresivamente su capa superficial.

Habitualmente fabricada en cuero ovino curtido con su lana, la piel Napalan se tiñe por el lado carne, ofreciendo un acabado de doble faz que combina resistencia exterior y gran confort térmico, ideal para abrigos invernales de alta calidad.

El complejo trabajo realizado sobre esta prenda consistió en la disolución cuidadosa de la pintura caída accidentalmente, sin dañar ni el acabado resinoso ni el color aplicado en la superficie.
Gracias a este tratamiento, se restauró el aspecto original del lado carne y se recuperó el brillo y textura característicos del acabado Napalan.

Para lograrlo, se emplearon productos específicos de última generación, desarrollados para el tratamiento de cuero natural.
El profundo conocimiento de los procesos de curtido y la aplicación de estos productos por personal con amplia experiencia, formado en seminarios impartidos por los propios fabricantes, garantizan su óptima aplicación y manejo profesional.
El resultado: la eliminación total de la pintura sin alterar las propiedades originales del chaquetón.

La seriedad y el respeto en el trato al cliente, junto con el sentido común y la transparencia al informar sobre posibles limitaciones o expectativas del servicio, avalan más de 40 años de experiencia profesional.

“Desde 1982, cuidando sus prendas, cuidando su imagen.”